Medidas de higiene venosa

 

 

1. Estilo de vida y actividad física

Caminar diariamente al menos 30 minutos.

Evitar el sedentarismo y las posiciones prolongadas (mucho tiempo de pie o sentado).

Ejercicios de bombeo muscular: mover tobillos, ponerse de puntillas, flexionar y extender las piernas.

Mantener un peso adecuado, ya que la obesidad empeora la presión sobre las venas.

 

2. Posiciones y descanso

Elevar las piernas varias veces al día (10–15 minutos) por encima del nivel del corazón.

Evitar cruzar las piernas al estar sentado.

Dormir, si es posible, con las piernas ligeramente elevadas.

 

3. Hábitos diarios

Usar ropa cómoda y holgada (evitar prendas que compriman muslos, ingles o abdomen).

Preferir calzado cómodo; evitar tacones altos o completamente planos.

Evitar la exposición prolongada al calor (baños muy calientes, saunas, sol directo sobre las piernas).

Duchas de agua fresca en las piernas pueden mejorar la sensación de pesadez.

 

4. Higiene vascular complementaria

Hidratación adecuada: beber suficiente agua.

Buena alimentación, rica en fibra, frutas y verduras para evitar estreñimiento (que aumenta la presión abdominal y empeora el retorno venoso).

Evitar el tabaco, ya que afecta la salud vascular.

 

5. Medidas terapéuticas

Uso de medias de compresión elástica en personas con insuficiencia venosa o várices, siempre bajo indicación médica.